La expresión corporal está, por regla general, aún más inhibida que la expresión verbal.
Existe toda una serie de reglas sociales que impiden que la relación con el propio cuerpo sea natural y espontánea. Entre ellas se encuentra cualquier contención de los procesos naturales: dietas estrictas, horarios inflexibles, higiene excesiva, vestimentas dañinas, normas de decoro o compostura y, también, la represión sexual y emocional.
En la edad adulta, la mayoría de las personas se hallan desconectadas de las necesidades de su cuerpo y siguen pautas de conducta aprendidas para relacionarse con él. Se ha perdido toda capacidad de expresión e improvisación: para cantar, bailar, jugar o, incluso, tener sexo, se necesita una guía de conducta corporal.
A mayor desconexión con el propio cuerpo, mayor rigidez en el todos los sentidos. La musculatura y el sistema óseo se ven afectados, a base de adoptar posturas inequívocas de poca maleabilidad. También la falta de fluidez provoca que las emociones queden retenidas, con las consecuencias inevitables que esto provoca en términos de enfermedad.
Devolver al cuerpo su fluidez natural, requiere permitirle movimientos libres. El cuerpo posee una inteligencia propia que sólo es posible conocer despojándolo de los hábitos adquiridos. La reconexión con el propio sentir del cuerpo o, lo que es lo mismo, recuperar la consciencia corporal, permite una vida más saludable, de mayor juventud y, sobretodo, más auténtica: cada persona puede aprender, desde su propia experiencia, lo que es bueno para ella, también en términos físicos.
La expresión corporal a través del baile es uno de los cauces más efectivos para volver al cuerpo: se trata de permitir que sea la resonancia de las diferentes vibraciones musicales, la que mueva el organismo.
También el resto de terapias corporales ayudan a ir liberando al cuerpo de las diferentes memorias adquiridas. No obstante, lo primero es que la persona entienda que debe salir de la esclavitud a la que tiene sometido a su organismo y se anime a "reaprender" su espontaneidad o ampliar su consciencia corporal.